“Hotel tranquilo trabajadores muy simpáticos el único problema que tuvimos fue que mi madre no pudo darse baños en la bañera ya que si le ponías jabón salía toda el agua por fuera del desagüe de fuera e inundaba todo el baño , avisamos vino el técnico y la solución que nos dio el hotel fue que no nos bañamos solo ducha , hello?? 4 estrellas ! Repetiré de Lisboa no del hotel”

“Nos alojamos en la habitación cuadruple con nuestros hijos y la habitación era enorme con dos camas de matrimonio y un saloncito con sofá,escritorio, sillón y demás. Bastantes armarios para todos, tv de buen tamaño y cuarto de baño aceptable. Nuestra habitación daba a una terraza interior bien decorada con macetas y césped. Nada de patio de luces como otros hoteles si no una agradable terraza bien mantenida diariamente por el jardinero. Otra cuestión a agradecer es que la habitación tenía ventanas exteriores con iluminación y ventilación natural. He leído reseñas de ruidos que nosotros también escuchamos pero se debían al metro que circula cerca del hotel. Respecto al taladro era por una obra en un edificio al lado del hotel. Hemos de entender que la vida en Lisboa comienza bien temprano y a las 7 ya estaba la obra en marcha. Se escuchaba pero como de lejos nada desquiciable. El desayuno tiene buen horario (de 7 a 10:30) pero, a mi parecer no estaba a la altura. Poca variedad y faltaban productos y vajilla que tardaban bastante en reponer y había que esperar. No disponen de leche sin lactosa ni vegetal. La pedí el primer día y tardaron 15 minutos en atenderme. Tostador casi siempre roto. Punto positivo para el café. Para mí la ubicación era ideal, muy cerca del metro y en un barrio muy moderno plagado de locales nuevos con cafeterías,salas de exposiciones y tiendas gourmets.También cerca está el Corte Inglés y el Parque Eduardo VIIdónde tuvimos la suerte de coincidir con la impresionante feria del libro. Las habitaciones y resto del hotel muy limpios con toallas limpias a diario y ni una nota de polvo. El personal de recepción muy amable”